Bueno pues este pasado Lunes volví a la oficina después de 2 meses y medio, para contaros que tal la experiencia, tengo que empezar por el principio.
Lo primero es que para no coger los dos transporte públicos que suelo coger, me pegue un súper madrugón para ir con mi madre hasta su trabajo y allí coger el metro.
Por alguna razón inexplicable el metro iba más rápido y en lugar de tardar 20 - 25 minutos, tardé 13, por lo que a las 6.30h de la mañana estaba en la oficina. Volver a coger el metro estuvo bien, no había mucha gente y esta respetaba las distancias y medidas de seguridad.
Como os podéis imaginar al final del día estaba muerta de sueño, no duré nada.
La sensación en la oficina fue un poco como en las películas post-apocalípticas, todo estaba igual que el día que nos fuimos, pero el ambiente era diferente, como si hubieran pasado años. Me gustó volver a mi mesa aunque fuera raro...
Hasta pronto
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